Proveedores
Rolando Suaña: “F45 trabaja con altos estándares de calidad y seguridad”
- Una buena imagen en un texto captura la atención y ayuda a que te detengas, algo que probablemente ninguna frase lo consiga, por impactante que pudiera ser.
- Sus proyecciones internacionales, de fotógrafo corporativo, han motivado que su empresa F45 Fotografía Industrial este proyectando abrir una oficina en Canadá y otra en Ecuador.
«Observo mis imágenes y me traslado a ellas, viendo los errores y procurando ser yo mismo mi mejor crítico. En realidad, disfruto siempre la última foto. Puedo tomar 10 de una serie y ninguna es igual a la anterior, combinas luces diferentes y logras efectos raros. Siempre digo UNA ÚLTIMA… pero no siempre es la última”. Palabras de Rolando Suaña, fotógrafo, editor gráfico, conductor de naves no tripuladas y asesor empresarial.
Suaña se ha acercado profesionalmente al sector minero, por lo tanto, comprende muy bien cuáles son los atributos que debe tener la fotografía industrial para hacer visibles a las marcas comerciales de esta actividad económica, aunque no exclusivamente de ella.
Este fotógrafo avanza su actividad profesional de la mano con la tecnología, destacando las fotos con drones plasmando imágenes de zonas inaccesibles de una operación minera.
Trabaja con compañías mineras más importantes que operan en el Perú, pero además participa en los eventos nacionales e internacionales como Perumin, proExplo, Conamin, e incluso en el PDAC que se desarrolla en Toronto, Canadá; Minexpo en las Vegas – USA, Convención Internacional de Minería en México – Acapulco, Expominas en Ecuador – Quito, China Mining en Beijing; Bauma en Alemania y ahora preparándose para Imarc en Australia; “Nuestro lente estuvo por diversas partes del mundo, México, Panamá, USA, Canadá, Alemania, China, Ecuador, Colombia, Chile, etc. ”
“Somos la única empresa de fotografía del mundo que va a las reuniones internacionales como un proveedor minero, como los proveedores de equipos o de explosivos. Eso también nos permite observar a los fotógrafos de Europa o Estados Unidos para adecuar su estilo de trabajo al Perú”, señala.
Menciona que actualmente, las compañías mineras son corporaciones que invierten en muchas partes del mundo, con políticas muy claras para realizar sus procesos de producción, por lo tanto, exigen que sus proveedores en este caso también la fotografía se realice de manera estándar, que refleje el sello característico e inconfundible de su marca.
“Esto nos obliga a salir del ámbito netamente nacional o local y proyectarnos a nivel global, respetando el ‘manual corporativo’ de cada organización”, enfatiza.
Rolando Suaña revela que esta proyección le ha motivado a crear una oficina en Canadá y otra en Ecuador, lo cual se comunicará oportunamente.
Las grandes corporaciones, según recalca el profesional, exigen homologaciones a los fotógrafos, tal como lo hacen con otros profesionales o técnicos de la producción o del proceso minero. “Incluso recibimos charlas de inducción y somos sometidos a exámenes médicos antes de realizar trabajos riesgosos, como en lugares de altura o zonas de acceso difícil”, comenta.
En cuanto a los equipos de protección personal (EPP), revela que las compañías mineras exigen a sus fotógrafos al igual que a todos los trabajadores de la mina, estar protegidos, tanto para actividades en superficie o interior mina. Asimismo, señala que en las compañías de hidrocarburos deben usar trajes antiflama y antichispa, por el riesgo de fuego que implica un trabajo en dichas compañías.
“También nuestros equipos de fotografía deben adecuarse al tipo de trabajo que vamos a realizar. Las corporaciones mineras trabajan con altos estándares de seguridad y eso incluye también a la fotografía,”, agrega.
Afirma que la fotografía con drones permite tener un panorama extraordinario e incluso del objetivo que se quiere fotografiar, pero es necesario volar preferentemente en las mañanas, porque a partir del medio día los vientos son más fuertes. Precisa que las antenas del dron también deben ser las adecuadas.
Reconoce que hay muchas cosas que no se pueden expresar con palabras y para que eso no suceda con la fotografía busca referencias antes, en un trabajo de preproducción que le ayuda mucho a imaginar algo intangible.
Afirma que el estado mental o emociones, influyen mucho en sus fotografías, por esa razón trata de estar un día antes en descanso, pensando solo en adaptarse al ambiente y dormir bien, “me desconecto del teléfono y empiezo a respirar imágenes”.
Reconoce que los fotógrafos de hoy, como los de antes, conocen de la medición de la luz y manejan temas como el diafragma, velocidad, sensibilidad, foto… también de cámara oscura o revelada.
“Todo ese conocimiento es muy importante. Al momento de hacer la foto ya estás mezclando en tu mente cómo va ser tu resultado final con la ayuda del LIGHTROOM”, comenta.
Conocer el proceso de laboratorio análogo es importante, pero Rolando Suaña llama al fotómetro “ojímetro”, porque calcula y combina velocidad, abertura, ISO, temperatura de color, entre otros.
Reconoce que la tecnología en los celulares ha venido para quedarse y cada vez mejoran la resolución. Agrega que un lente más angular, una opción de teleobjetivo modo retrato desenfocando el fondo, estabilizador que evita foto movidas, opción de foto en poca luz, time lapse, son herramientas para lograr una buena imagen.
Señala con mucha convicción que la fotografía hace visible lo imposible y creativo lo cotidiano.
Repite aquella conocida frase que “una imagen vale más que mil palabras” para afirmar que esto es totalmente cierto, porque las imágenes proporcionan a un texto algo de magia que no se puede expresar… “Una buena imagen captura la atención y ayuda a que te detengas, algo que probablemente ninguna frase lo consiga, por impactante que pudiera ser”.
Este fotógrafo ama tanto a su trabajo como a las imágenes que consigue. Recuerda que al terminar una imagen le pone un nombre, “la bautiza”.
En su opinión una buena foto es aquella que impulsa a verla varias veces.
En más de 26 años de actividad profesional, Rolando Suaña reconoce que hay muchos objetivos que hubiera querido plasmar en imágenes y aún no ha sido posible.
“Me gustaría hacer fotografía marina, tomarle fotos a una nave extraterrestre con sus tripulantes, a una melodía de Queen… entre muchas otras”, comenta con entusiasmo.