• Es resultado de más de 40 años de esfuerzos de investigación.
• Se propone convertir a Uchucchacua en la mina de plata más grande del mundo.

Buenaventura es una compañía minera, no de investigación, sin embargo, ha realizado una investigación metalúrgica que después de 40 años de esfuerzos ha resultado exitoso y ha terminado en una planta moderna que es la Procesadora Industrial Río Seco.

La empresa necesitaba resolver dos temas muy importantes: Limpiar el manganeso de los concentrados de plata de la unidad Uchucchacua que originaba problemas con las fundiciones por las dificultades en su procesamiento. Por otro lado, la compañía tiene minas con recursos importantes de cobre arsenical y es conocido que los concentrados con alto contenido de arsénico tienen grandes restricciones comerciales y de medio ambiente, además los costos de fundición y los castigos son elevados.

PROCESADORA INDUSTRIAL RÍO SECO

La unidad Uchucchacua, produce concentrados de plomo y plata con alto nivel de manganeso en forma de sulfuros, principalmente alabandita,  un mineral, que con el agua, tiene una reacción exotérmica. En las fundiciones formaba una suerte de costra sobre los hornos obligándoles a parar y dinamitar esa costra para continuar el proceso. También la empresa tuvo problemas en el puerto del Callao, pues con la humedad el concentrado, en no pocas ocasiones, estuvo a punto de incendiarse.

Más de 40 años de esfuerzos de investigación de Buenaventura han concluido  en la construcción de la Procesadora Industrial Río Seco, ubicada entre Huaral y las Lomas de Lachay. Es una planta moderna,  pionera en el Perú y Latinoamérica, que produce sulfato de manganeso monohidratado de alta calidad, usando como materia prima los concentrados de plata con alto contenido de manganeso procedentes de la unidad minera Uchucchacua.

La planta está construida con tecnología de punta, con los más altos estándares de calidad y 100% amigables con el medio ambiente, lo cual permite cumplir con la normativa vigente, reduciendo los impactos ambientales, colocando al Perú entre los países industriales con las tecnologías más avanzadas.

La procesadora tiene tres áreas grandes: Planta de lavado ácido, Planta de ácido sulfúrico y Planta de cristalización de sulfato de manganeso. Se producirá 22,000 toneladas por año de sulfato de manganeso monohidratado de alta calidad, un micronutriente, producto de exportación usado para la agricultura y la ganadería, siendo los países de mayor desarrollo de la agricultura tecnificada los principales consumidores de este producto. Además, es materia prima para la fabricación de aceros, baterías, pigmentos, entre otros.

La Planta de ácido sulfúrico producirá este ácido mineral, uno de los 20 productos químicos más importantes en la industria química,  con la tecnología de ácido sulfúrico de gas húmedo (WSA) a través de gas sulfhídrico y azufre elemental, obteniendo una producción de 70 TMD de ácido sulfúrico que alimentará a la planta de lavado de ácido.

La Planta de lavado ácido, por otro lado, lixibiará 126 TMD de concentrado, produciendo de esa manera el sulfato de manganeso, concentrado de bajo manganeso, yeso y gas sulfhídrico.

Con esta planta se logró subir la recuperación de plata en Uchucchacua de 67% a 80%. Las reservas de la mina también se incrementaron, porque ya se podía tratar los minerales con alto manganeso, en algunos tajeos. Además la planta genera un valor agregado, pues eleva de 60 oz  de concentrado a 100 oz y baja el manganeso de 26% a 2%.

Hay otro aspecto que destacar. Con el exceso de calor en la planta de ácido sulfúrico se generan 700 KWH de energía, es decir, la tercera parte de la demanda de la planta. Además se construyó una subestación eléctrica en Huaral con el que no solo se da energía a la planta Río Seco, sino también se ha mejorado el servicio eléctrico en Chancay y Huaral.

La compañía ha logrado dos patentes: una del Proceso Buenaventura y otra de la Precipitación de Arsénico, ambos ya aceptados en Estados Unidos y en proceso en Perú (Indecopi) y en Chile.

La planta Fue inaugurada en el 2013 concretándose más de 40 años de esfuerzos de Buenaventura, lo cual es digno de ser resaltado, por ser una empresa nacional, que ha invertido capital nacional. Fue un hito trascendente para la compañía. Don Alberto Benavides de la Quintana, fundador de Buenaventura, estuvo presente en la inauguración y tres meses después partió rumbo a la eternidad. Sus herederos trabajan con denuedo para concretar la meta de convertir a Uchucchacua en la mina de plata más grande del mundo.

De la planta de cobre, otro proyecto en marcha de Buenaventura, nos ocuparemos en la próxima entrega.