• Perú tiene capacidad humana competente para asumir retos, además hay herramientas que no han sido usadas.
• La mejor medida sería poner en marcha los grandes proyectos mineros paralizados.

El Ing. Rómulo Mucho Mamani, conocido empresario y analista severo de la realidad nacional, sostuvo que el país está llegando a un momento muy complicado como resultado de un manejo  sanitario y económico  “desastroso” del Covid-19, destruyendo los activos económicos y sociales de las últimas tres décadas. Recordó que la informalidad, hasta antes de la pandemia, estuvo en 70%, pero como van las cosas puede llegar a 80% y la pobreza  retroceder en unos 10 puntos. Para revertir este  “resultado devastador” dijo que el país debe aplicar decisiones radicales, romper paradigmas, proceder con inteligencia y mucha audacia impulsando la inversión privada, especialmente, la minera.

En el Seminario Web (Webinar) “Rol de la minería en la reactivación económica”, organizado por el Centro de Estudios Mineros –CESMIN, de la Universidad Jorge Basadre Grohmann, señaló que el Banco Mundial proyecta un decrecimiento del PBI peruano en 12% en el 2020, cifra coincidente con la del BCRP, aunque, según algunos economistas nacionales, la caída será entre  15% y 20%.

Recordó que entre el 2004 y 2013, el país tuvo su etapa dorada, logrando indicadores económicos y sociales admirados por propios y extraños, a tal punto que fue calificado de “Milagro Peruano” por los resultados macroeconómicos obtenidos y la reducción de la pobreza. El Perú creció a un promedio del 6%. “En los últimos siete años veníamos en franco retroceso económico y social, creciendo a un promedio de 3% por lo tanto, la pandemia nos agarró en un momento ya crítico”, expresó.

Como van las cosas – según dijo Mucho- la pobreza puede retroceder hasta 10%, lo cual significará que un tercio de la población peruana nuevamente se  ubique en esa inaceptable condición.

Sostuvo que la burocracia que ocupa el ejecutivo desde hace 09 años, no ha comprendido que la inversión y el empleo tienen un efecto directo en la reducción de la pobreza. Solo en Lima, agregó, se ha perdido más de 2.5 millones de puestos de trabajo según el INEI, eso proyectado a nivel nacional, puede llegar hasta 5 millones.

Hizo hincapié en que el Perú tiene capacidad humana muy competente para asumir estos retos con real eficiencia, además hay herramientas que no han sido utilizadas o se ha utilizado a medias. “Han imperado políticas públicas sin un análisis profundo de la situación, el Comando Covid no ha obtenido los resultados que el país esperaba”, recalcó.

Rómulo Mucho dijo que de otro lado, la clase política representada en el Congreso de la República, también compite en medidas populistas con el ejecutivo, el asistencialismo y populismo llevan al fracaso a las naciones, en este momento si es necesario el asistencialismo, pero tiene que ser temporal enfatizó.

Puso de relieve que entre Chile, Argentina, Colombia y México, ninguno de ellos ha tenido un confinamiento tan prolongado ni parálisis económica tan drástica como el Perú, como resultado, la caída de sus economías han sido mucho menores al caso peruano porque han manejado mejor la pandemia.

Empero sostuvo que las cifras que se manejan sobre el PBI son proyecciones que no se debe permitir se cumplan, el gobierno puede mitigarlo tomando medidas sumamente radicales  y audaces en la gestión del país. “No se trata de que con algunas medidas se supere la caída dramática, pero se puede atenuar con medidas eficaces, incluso hasta llegar por debajo de los 2 dígitos”, comentó.

¿QUÉ HACER?

En opinión de Rómulo Mucho, para responder a este devastador resultado que deja la pandemia, se tiene que romper paradigmas, el gobierno debe proceder con inteligencia y mucha audacia, aliarse con la empresa privada para impulsar las inversiones, aparte de los programas de inversiones públicas que viene empezando, estos darán empleos temporales. “El Estado solo  no tiene capacidad para reactivar la economía y enfrentar con éxito la pandemia, su capacidad financiera también se viene debilitando”, señaló.

Dijo que el plan Reactiva Perú orientado a proporcionar liquidez a las empresas, para no romper la cadena de pagos, parecía una buena estrategia, pero al final no ha solucionado ni la quiebra de empresas, ni la pérdida de empleos, “El segundo Reactiva Perú, con otros S/.30 mil millones, probablemente tenga mejor aplicación especialmente a las pequeñas empresas quienes mueven el empleo y el mayor consumo familiar”, conjeturó.

Entre las medidas drásticas que debe acometer el gobierno, en opinión de Mucho, es cerrar algunos ministerios, y reorientar ese presupuesto para resolver los temas centrales que son salud, educación y alimentación, habida cuenta que de todo el presupuesto nacional, alrededor del 70% se va en gasto corriente, en mantener a una burocracia ineficiente, quedando poco dinero para inversión.

Por  otro lado, sostuvo el expositor, que si realmente se quiere lograr la formalización de las pequeñas y micro empresas, el Estado mismo tendrá que dejar de ser el gran obstáculo para ello y hacer una reformulación total de sus normas y procedimientos, así como realizar una reforma tributaria integral.

Asimismo, recordó que como se sabe el 80% de la inversión nacional proviene del sector privado, sólo el 20% es inversión pública, agregando que esta última, por cierto, genera puestos de trabajo, pero por lo general temporales, en cambio la inversión privada, generalmente es de mediano y largo plazo, es la que genera ahorros y riqueza, la minería, por ejemplo.

Calificó de “indispensable” el impulso de las inversiones, pues sin ella no hay economía que camine. Ahí están el agro y la minería, agregó, la minería tiene grandes proyectos paralizados por conflictos sociales que no hemos podido superar, también indicó que están paralizadas grandes proyectos de infraestructura, como carreteras, puertos, aeropuertos, obras hidráulicas e inmobiliarios. “La reactivación de todas estas obras significarían recuperar cientos de miles de puestos de trabajo”, enfatizó.

CARTERA DE PROYECTOS MINEROS

Profundo conocedor del sector, Rómulo Mucho precisó que el país tiene 48 proyectos mineros en sus diferentes etapas de avance. El 49% ya cuenta con estudios de prefactibilidad, con una inversión de U$ 29 mil millones de dólares; el 28% con estudios de factibilidad por U$ 16 mil millones; el 7% con ingeniería de detalle U$ 4 mil millones; y el 16% en construcción por U$ 9 mil millones, En todos estos proyectos la inversión total asciende a U$ 58 mil millones.

Muchos de estos proyectos, según indicó, están paralizados hace años y el Perú ha perdido una gran oportunidad de aprovechar sus frutos, porque varios ya estuvieran en construcción y algunos incluso en producción, esto también hubiera ayudado a tener mejores indicadores socioeconómicos antes de la pandemia.

“En la mentalidad de ciertas personas o grupos impera aquella consigna de agro sí minería no, lo cual ha hecho mucho daño al país”, comentó.

Argumentó que un proyecto bien llevado, con respeto al medio ambiente y llevando progreso a las comunidades y pueblos del entorno, siempre será exitoso y genera bienestar para todos. Mencionó dos casos como ejemplo de  explicación: Apurímac y Cajamarca.

“En el primero, Las Bambas está contribuyendo a la reducción de la pobreza y mejorando significativamente el bienestar de los pueblos de su entorno; en cambio Cajamarca, donde hubo una oposición radical a algunos proyectos mineros, ha quedado hoy como una de las regiones con el mayor índice de pobreza monetaria del Perú, cuando bajo su suelo hay miles de toneladas de cobre con contenidos de oro, molibdeno y plata, que puede elevar radicalmente su economía”.

“Nuestros gobernantes deben comprender que cuando un proyecto sale, jala a  otro, pero cuando un proyecto no sale, caen otros si la causa son conflictos sociales, esto es lo que vemos en la práctica”, recalcó.

Tras expresar su beneplácito de que la gran minería ya haya iniciado sus operaciones,  “aunque sea a trompicones”, sostuvo que, como siempre, el sector contribuirá a mejorar los índices socioeconómicos del país. “La caída de la economía en abril fue de 40%, en mayo, calculo que podría reducirse a 30% porque la minería mueve a muchas empresas que se desarrollan en su entorno: proveedores de bienes y servicios o contratistas, entre otros”, indicó.

A mediados de junio –agregó- arrancó la mediana, la pequeña y minería artesanal, que concentran la mayor cantidad de trabajadores, por lo tanto, es posible que este mes haya una mejor recuperación de la economía.

Rómulo Mucho recordó que el Perú se encuentra en estado de emergencia o cuidados intensivos, por lo tanto, el gobierno debe asumir su responsabilidad de poner en marcha los proyectos SÍ o SÍ, que garanticen las condiciones sanitarias, ambientales y de seguridad. “El Perú puede salir de esta grave situación actuando con inteligencia, valentía y decisión”, recalcó.