• Entre enero y noviembre del 2023 cayó 6,1%, por lo que se proyecta un retroceso solo superado en los años de pandemia y crisis financiera.
• El gremio industrial también apunta a que en el 2024 el sector experimentaría un crecimiento de solo 2,3%.

La industria peruana tendría en el 2023 su tercera mayor caída de los últimos 30 años, con un retroceso de 6,4%, proyectó el Instituto de Estudios Económicos y Sociales (IEES) de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI). Esta caída es solamente superada por la del 2020 (pandemia del Covid-19) y la del 2009 (crisis financiera internacional).

Por subsectores, el IEES de la SNI estimó que la manufactura no primaria (la de mayor agregado y donde se producen bienes de consumo, bienes intermedios y bienes de capital) cerraría el 2023 con una caída de 8,2%; mientras que, la manufactura primaria lo haría con un retroceso de 0,5%.

Principales factores

El IEES de la SNI refirió que los principales factores de la caída de la industria en el 2023 fueron la menor producción de procesamiento y conservación de pescado, principalmente por el fenómeno El Niño, así como el menor gasto de los hogares y de las empresas en bienes de consumo, afectado por la elevada inflación y la caída de la actividad económica.

Otro factor negativo fue el retroceso de otros sectores como la construcción, debido al elevado encadenamiento productivo de la manufactura con esta actividad, generando una menor demanda de bienes intermedios industriales, los cuales vienen experimentando trece meses consecutivos de caída en su actividad industrial.

Proyecciones para el 2024

El gremio industrial también prevé que este 2024 el sector experimentaría un crecimiento de solo 2,3%, lejos de las recuperaciones experimentadas en años previos, pero alcanzando los niveles de producción prepandemia. En esa misma línea, la manufactura no primaria escalaría apenas un 1,7%, y la primaria un 4%.

Este crecimiento de 2,3% estaría basado, por un lado, en un rebote estadístico dado que 2023 registró meses negativos relacionados con choques desfavorables como los conflictos sociales, el fenómeno El Niño Costero y el ciclón Yaku. Por otro lado, debido a la mejora gradual del consumo privado, influenciado por el mayor poder adquisitivo de las familias al haber cerrado el año 2023 con una inflación de 3,2%, después de haber alcanzado un incremento de precios de 8% en el primer semestre de ese año.

Asimismo, vinculado al menor incremento de los precios, el sector se vería favorecido por la reducción paulatina de las tasas de interés de referencia, así como la aceleración de la ejecución del gasto público para mitigar los impactos del fenómeno El Niño en el 2024

Sin embargo, en este 2024 la industria requiere crecer no solo por rebotes estadísticos o la recuperación de indicadores fundamentales para la economía como la inflación, sino también con medidas que inicien un crecimiento basado en la recuperación de la productividad y competitividad del sector.

En noviembre de 2023 también cayó el PBI industrial

Con base a datos del INEI, el IEES de la SNI informó que, si bien el PBI nacional se recuperó en 0,3% en noviembre del 2023, la industria peruana siguió retrocediendo y tuvo un descenso del 0,5%, con el que sumó 10 meses consecutivos de caída, desde febrero al mes citado. En total, el sector tuvo una caída acumulada entre enero y noviembre del año pasado del orden del 6,1%. Cabe resaltar además que el descenso de la industria a lo largo del 2023 significó 0,73 puntos porcentuales menos al crecimiento económico del país entre enero y noviembre del año pasado, siendo el sector que más ha restado al desempeño de la economía peruana durante los primeros once meses del 2023.

La gravedad de la caída de la industria nacional se evidencia aún más en el retroceso de la manufactura no primaria, la cual se contrajo un 6,7% en noviembre del año pasado y acumuló 14 meses seguidos de caída. De acuerdo al IEES, el desempeño negativo de -8,5% entre enero y noviembre del 2023 de este subsector, es explicado por el retroceso de la producción de bienes de consumo y bienes intermedios, que acumularon una caída de 8,2% y 9,7%, respectivamente, en los primeros 11 meses del 2023.