Lunes 20
de Mayo, 2024

Energía

César Gutiérrez: “El Perú paga por el diesel y las gasolinas, 45% por encima del precio real

César Gutiérrez: “El Perú paga por el diesel y las gasolinas, 45% por encima del precio real
  • Las refinerías, lo que pierden por el residual tratan de recuperar por las gasolinas y el diesel, sostiene el especialista.
  • El precio bajo del gas natural favorece al precio de la electricidad, por ende, a consumidores en general, la minería entre ellos.

 

En el Perú hay permanentes polémicas, afirmaciones y dudas sobre el precio de los combustibles. El comentario generalizado es: ¿Por qué no baja el precio de los combustibles si el precio del crudo ha caído en el mercado mundial? Y la preocupación tiene sentido, porque el precio de los combustibles impacta en la canasta básica.

Y quién mejor que el Ing. César Gutiérrez Peña, reconocido consultor internacional en hidrocarburos, para darnos luces sobre el tema. “La tasa de crecimiento del petróleo crudo, por cierto, influye en el precio de los combustibles líquidos (diesel y las gasosolinas), pero no sigue la misma proporción”, precisó el especialista.

A veces ocurre -según dijo-, que determinado combustible, por ejemplo el diesel, tiene una tasa de crecimiento mucho más alto que el petróleo y lo mismo puede suceder con los gasoholes (gasolina combinada con etanol).

Agregó que los combustibles de mayor valor para las refinerías son las gasolinas y el diesel y los productos de menor valor y perjudican los ingresos de las refinerías, son los residuales y el GLP cuyos precios de venta son menores que el costo del insumo petróleo crudo.

Las refinerías, según argumentó, tienen un diseño y para cambiar ese diseño y lograr que disminuya la cantidad de residuales y maximice el diesel y las gasolinas, es necesario invertir miles de millones de dólares. “La refinería de Talara, para disminuir la cantidad de residuales de 30% a 10% y aumentar las gasolinas y el diesel al 90%, ha invertido alrededor de US$ 6,000 millones.

“No todas las refinerías pueden hacer eso. Lo que hacen es lo siguiente: Aquello que pierden por el residual tratan de recuperar por las gasolinas y el diesel, pero estos combustibles líquidos no siempre se producen en porcentajes que el mercado demanda”, señaló.

Recordó que en ocasiones la demanda del diesel en el mercado es muy grande y hay escasez de este producto, como ocurre con el conflicto Rusia – Ucrania. “En este caso el precio del diesel se eleva por encima del precio del petróleo; y cuando el precio del petróleo cae el precio del diesel no cae en la misma proporción”, recalcó.

Gutiérrez reveló que el diesel es muy utilizado en la minería, muy poco en la industria, pero es igualmente utilizado en grandes porcentajes en el transporte de carga y transporte interprovincial de pasajeros. “Pero estos últimos constituyen son mercado predatorio en precios por el exceso de unidades circulando”.

Dijo que en el Perú existen 100,000 empresas de transporte de carga con 300,000 unidades, con una economía muy precaria. Agregó que el gobierno subsidia el precio del diesel, con el 2% del valor real, este subsidio es contable.

Puso un ejemplo concreto: “Si el precio del diesel debe costar 20 soles, el gobierno les dice a los importadores y productores, como Petroperú, La Pampilla y otras dos empresas más, que solo cobren 18 soles, los 2 soles por galón restantes anota y te pagaré después”.

Sin embargo, enfatizó que ese pago no tiene fecha cierta de pago y los importadores y productores tienen una gran cuenta por cobrar que ya supera los S/. 1,000 millones que les genera iliquidez.

“Para paliar este problema estas empresas suben el precio de las gasolinas. Por esta razón el precio de estos carburantes está alrededor del 45% por encima de lo que realmente debería estar”, reveló.

Para resolver este problema, el especialista demandó al Ministerio de Economía y Finanzas, ente que decidió este subsidio hace 14 años, a establecer plazos predecibles de devolución de esa deuda a los productores e importadores y debe cumplirlos. “No hay otra solución”.

Hizo hincapié en que el precio del petróleo ha bajado en el verano del hemisferio norte y eso se ha sentido en los combustibles, aunque en menor proporción, también en el Perú, “pero en el invierno del hemisferio norte, entre, diciembre y marzo es muy posible que los precios de los combustibles suban a nivel mundial, lo cual obviamente repercutirá en la inflación”.

El gran suministrador del crudo y del diesel al mercado europeo, según reveló, es Rusia y con los grandes embargos que sufre este país, como consecuencia de la guerra, hay problemas serios. En esto nadie puede suplir a Rusia en el corto plazo.

El gas natural

César Gutiérrez, precisó que el precio del gas natural, por unidad de energía, es 3.44 dólares por millón de BTU, en su equivalente, el mercado americano, nuestro referente, es 8.50 dólares, es decir, el precio del gas natural en el Perú es menos de la mitad del precio internacional equivalente.

Recordó que en el 2006, el gobierno junto con Pluspetrol, llegaron a un acuerdo en la forma cómo se reajusta el precio del gas natural. En el mundo este reajuste se basa en el precio del residual, en el Perú el reajuste se da de acuerdo a la inflación americana que ha sido del orden del 3% al año entre el 2006 y el 2020.

“Por esta razón, las subidas exponenciales que se han dado en otras latitudes, no se produjeron en el Perú. Este precio bajo del gas favorece al precio de la electricidad, por ende, a grandes sectores, como la minería, que la aprovecha como cliente de gran consumo”, subrayó.

Sin embargo, fue enfático al expresar que este precio bajo no llega con el mismo impacto al sector residencial que alberga a 8 millones de consumidores, aproximadamente, porque los mecanismos de interacción del mercado, entre el gran consumidor y el menor consumidor, tienen reglas que ya no corresponden a esta época y deben ser cambiados.

“Esta es una consecuencia de reglas que se dieron en otro escenario, por lo tanto, deben ser cambiadas de acuerdo a la realidad actual”, recalcó.

La masificación del gas

El experto sostuvo que el tema de masificación del gas natural está en boca de representantes del gobierno y de los políticos en general, pero todos ellos lo utilizan de manera demagógica, sin entender lo que realmente significa.

“En el Perú hay aproximadamente 8 millones de hogares y los que tienen gas natural son 1.5 millones, es decir, faltan 6.5 millones para dotar a todos con este servicio”, precisó.

Explicó que los concesionarios de la red de distribución tienen como prioridad atender al gran consumidor. “Y esto es explicable. Con 5 compañías eléctricas, es decir, cinco facturas mensuales, tiene asegurado el 62% de sus ingresos, mientras que con 1.5 millones de facturas residenciales sólo tiene el 2 % de sus ingresos”.

Resaltó que dentro de esta realidad el concesionario no tiene ningún incentivo para llevar gas natural a los hogares.

Pero César Gutiérrez aún señaló Mayores precisiones: “Tender redes y conectar interna y externamente a cada hogar, cuesta 3 mil dólares por consumidor, por lo tanto, si alguien se decide dotar de gas natural a 100 mil hogares, tendría que invertir 300 millones de dólares. Ningún concesionario está dispuesto a asumir este costo por ser sumamente oneroso”.

Recordó que la otra alternativa que se escucha a los políticos es que el Estado se encargue de la masificación del gas, agregando que este es un discurso netamente populista, sin fundamento técnico, “si el privado no lo puede hacer menos lo podrá el Estado, cuyos recursos financieros escasos deben ser orientados a resolver serios problemas de alimentación, salud y educación”.

Pero Gutiérrez no solo se dedica a criticar, sino que presenta alternativas de solución. Informó que hace ya algunos años, una opción adoptada por Estados Unidos ha dado buenos resultados: las cocinas de inducción, que son cocinas eléctricas de alta eficiencia, porque si se toma 100 unidades de energía, se aprovecha 78 unidades para cocinar y solo se pierde 22.

“Este sistema resulta mucho más eficiente que el gas natural, el GLP y la cocina eléctrica tradicional”, recalcó.

Indicó que en el Perú alrededor del 97% de consumidores tienen redes eléctricas, en consecuencia, darles cocinas de inducción costaría mucho menos que la masificación del gas natural. Hizo hincapié en que el pequeño consumidor peruano paga 30 soles mensuales por balón de gas natural, con subsidio incluido, pero si se les dota de cocinas de inducción solo pagarían 13 soles al mes y sin cambiar las tarifas ni nada, solo se cambiaría de paradigma.

“Pero el gobierno ni los congresistas no piensan en esta alternativa realista y que ya tiene experiencia exitosa. Solo repiten sin pensarlo: “masificación del gas”, lo cual es un mito”, subrayó.